Anunciada la instalación del primer ordenador cuántico del sur de Europa en el Barcelona Supercomputing Center
El proyecto Quantum Spain, impulsado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital contará este año 2023 con el primer ordenador cuántico del sur de Europa, al que tendrá acceso la comunidad investigadora para poder desarrollar aplicaciones de Inteligencia Artificial.
Este proyecto, financiado con fondos europeos del Plan de Recuperación, será llevado a cabo por el grupo de empresas españolas, integradas en la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por la startup Qilimanjaro Quantum Tech y la compañía tecnológica española GMV, que han ganado el concurso público.
El nuevo ordenador cuántico se instalará en el Barcelona Supercomputing Center - Centro Nacional de Supercomputación (BSC – CNS) y se integrará en el superordenador MareNostrum 5, el más potente disponible en nuestro país y entre los más avanzados de Europa y del mundo.
Quantum Spain logra con esto un nuevo hito en su objetivo para crear un ecosistema cuántico eficaz en España. Esta iniciativa, que se enmarca en la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial de la agenda España Digital 2026, cuenta con 25 centros, ubicados en 14 Comunidades Autónomas e integrados en la Red Española de Supercomputación (RES), que coordina el BSC-CNS.
España fue uno de los seis países europeos seleccionados por la European High Performance Computing Joint Undertaking (EuroHPC JU), para albergar y operar los primeros ordenadores cuánticos EuroHPC. La inversión en nuestro país ascenderá a un total de 12,5 millones de euros, cofinanciada al 50% por la UE y por el Gobierno de España.
La instalación esta prevista a lo largo de 2023 y estará integrada en el supercomputador MareNostrum 5, que estará operativo el próximo mes de julio. MareNostrum 5 permitirá avanzar en múltiples aplicaciones académicas y supondrá un paso más hacia la próxima frontera de la supercomputación.
De esta forma, se aumentará de manera notable el impacto de la investigación y la innovación al permitir soluciones que complementan las capacidades de los supercomputadores actuales. La nueva infraestructura estará a disposición de la comunidad investigadora, empresas y organismos públicos.